Ahora, lo prometido es deuda, voy a presentaros la SENDA DE LA TAUMATURGIA
La hematolatría induce a algunas brujas a practicar la taumaturgia, conocida también como “magia de sangre”. Es una de las sendas más poderosas y mortíferas de la hechicería oscura. Las iniciadas cambian su perfil máximo por el siguiente: M15 HA4 HP4 F4 R4 H2 I5 A2 L8.
Para beneficiarse de la taumaturgia hay que sacrificar al menos una víctima por cada dos brujas en un rito anterior a la partida. Lanza 1D6 por cada bruja para conocer sus BENEFICIOS (si dos de los atributos han alcanzado su máximo puedes repetir tirada):
1-2) +1M, +1HA/HP, inmune a los venenos.
3-4) +1M, +1F/R, inmune a la psicología.
5) +1M, +1I/L, insensible al dolor.
6) +1M, +1H/A, insensible al dolor.
Las brujas que se inician en la taumaturgia suelen quedar fascinadas por el poder de la sangre y a menudo se convierten en adictas a ella. Probar la sangre en un solo rito permite experimentar su poder y genera curiosidad, pero sus beneficios sólo son comparables a sus RIESGOS:
Tras el Segundo Rito:
Sed de sangre. Si no consumen sangre antes de una partida, se irán consumiendo y perderán en la siguiente partida en 1D6: 1-2) 1R, 3-4) 1F, 5-6 1M. Padecerán sed de sangre y estarán sujetas a la furia asesina. Para calmarla deberán tomar sangre de alguna víctima (enemigo o siervo), recuperando un punto de atributo por turno:
- Víctima en pie. Deberá superar una tirada de impacto por turno (+1 si está trabada en combate). Cada turno el enemigo perderá 1H hasta caer derribado.
- Víctima derribada. Deberá superar una tirada de impacto +1 para beber su sangre, quedando el enemigo aturdido.
- Víctima aturdida. Tomará su sangre de forma automática, quedando el sujeto fuera de combate.
Otra opción para saciar la sed de sangre es mantener viva a una víctima en lugar de sacrificarla: una víctima saciará a tres brujas. Pero deberán seguir tomando sangre después de cada partida, pudiendo morir la víctima con un resultado de 1 en 1D6.
Tras el Tercer Rito:
Nocturna. La excesiva ingesta de distintas sangres ha provocado en la bruja una patología en su sangre que afecta a su piel, siendo especialmente sensible a la luz natural y creándole fotofobia. La bruja actuará preferiblemente de noche, a cubierto o en la sombra. Si se expone a la luz diurna sus atributos se verán debilitados: -2M, -1HA, -1F.
Tras el Cuarto Rito:
Daños flamígeros. La corrupción de la sangre de la bruja hace que su cuerpo sufra más de lo habitual cuando se expone al calor. Los incendios, armas y objetos flamígeros les causarán daños adicionales.
Ristra de ajos. El ajo fortalece los huesos y es un revitalizante natural de la sangre. Las brujas serán especialmente sensibles a su fuerte olor y, dada la corrupción de su sangre, les provocará daños en la pituitaria, dolor de cabeza y dificultad para respirar. Bajo estas circunstancias, las brujas que pretendan atacar a alguien que porte ajo deberán superar un chequeo de Liderazgo.