Claustro de lo Arcano

Started by Shandalar, July 24, 2014, 23:24:14 PM

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Anselmo el Setas

Cierto, eso se podría aprovechar.

Hablamos de que la idea de base era un culto con influencia y riquezas, parte de lo que hay por ahora está representado, cultistas y magos de tzeentch, pero la parte de la influencia es claramente la que falla. Podrían tener acceso más fácil a buscar objetos o directamente que una vez por fase de comercio puedan no necesitar tirar rareza para encontrar un objeto (uno que no sea de su equipo especial y posiblemente que tampoco sea un arma, por eso de tener un rollo más académico), puede que ésto con alguna que otra limitación más. Algunos héroes (puede que sólo el jefe) podría empezar con un arma enjoyada algo más barata de lo normal.

También comentamos que podrían empezar con algo más de calderilla igual que los Marienburgueses.


Neithan

 Pero sus héroes son humanos no? Quiero decir que los Marines de los Mil Hijos serian buenos para los Heraldos pero estos son mas humanos con picos, garras y alas.

Shandalar

Hombre, pasan por hechiceros del Caos tranquilamente los de los mil hijos.

Voy a tener que pensar en un trasfondo claro a partir de eso, para ver como entran ahí las demás cosas.

Neithan

Si son buenos hechiceros para representarlos, pero lo que quiero decir es que esta banda en concreto esta formada por humanos "bendecidos" por Tzeentch y no guerreros del Caos.
Por ejemplo, los Tzeengor son buenos secuases basicos y algunos de la caja de Silver tower valen para Héroes.
Pero los Hechicero pegan mas en la banda de Heraldos.

Anselmo el Setas

Bueno, el Maestro del Cónclave tiene peana bárbara y los devotos también, son humanos pero hasta cierto punto, es lo que tiene el Caos.

DaniDiablo

A ver, mas que nada yo los veo como mezcla entre guerreros del caos y humanos simples, como serian los de la feria. Tienen que tener personalidad, y que resalte mas el hecho de que siguen a tzeentch, que no sean como los heraldos.

Shandalar

A ver qué os parece. Es un boceto del trasfondo, no es la versión definitiva ni mucho menos, pero ya podemos partir de algo:


Esperanza. Nadie pensaría que fuera peligrosa, pues es la esperanza lo que permite a la gente llegar a más, mejorar su suerte y sobrevivir frente a las adversidades. Pero la esperanza es también el deseo de cambiar, la voluntad de recrear lo que ya existe. La esperanza socava el orden establecido, modifica lo que considera injusto, transforma las cosas al antojo de los sueños; es el capricho que conduce a la senda de la condenación. Por eso Tzeentch es el dios más peligroso de todos, pues cualquiera con buenos pensamientos puede acabar siendo su devoto servidor.

Tzeentch ofrece un gran poder a sus servidores, pues el más común de los mortales puede convertirse en un poderoso hechicero si recibe la bendición de El Que Cambia Las Cosas. Pero cada uno de sus dones conlleva un precio terrible, pues sus seguidores son retorcidos y grotescos, seres extraños alterados mediante mutaciones y corrupción. Pero, a pesar de los riesgos que entraña el adorar a Tzeentch, las recompensas y la promesa de poder son demasiado grandes para ser ignoradas. Los esbirros de Tzeentch son los más poderosos de todas las sectas caóticas, pues mientras que los seguidores de Slaanesh son individuos decadentes que solo buscan autocomplacencia y satisfacción, los esbirros de Nurgle propagan la muerte y la corrupción, y a los fieles de Khorne solo les mueve la violencia, las sectas de Tzeentch tienen una motivación bastante clara: reformar el Imperio y la civilización humana a su imagen y semejanza.

Y, precisamente, en estos oscuros tiempos si hay algo que la gente necesita es esperanza. La anarquía reina en el otrora poderoso imperio de Sigmar, ningún emperador se ciñe su corona, los bandidos campan a sus anchas, los hombres bestia y pielesverdes saquean sin oposición y los corruptos nobles y burgueses se llenan los bolsillos a costa del sufrido pueblo mientras son a la vez incapaces de arreglar nada. Entre semejante sumidero de vileza, las personas necesitan algo a lo que aferrarse. Algo que les haga salir de la desesperación y encarar el futuro con otra perspectiva. Necesitaban creer.

Y en este caldo de cultivo ideal para el Gran Conspirador empezó a propagarse el rumor de un nuevo culto. Al principio, eran solo susurros, sabidos por casi nadie. Un grupo de personas que ayudaban a la gente que acudía a ellos. Los enfermos se curaban, los pobres prosperaban, el desesperado encontraba consuelo. Ofrecían esperanza, esperanza en un futuro mejor, en conseguir salir de la penosa situación que vivían. Y empezaron a hablar del fundador del grupo, conocido como el Padre de los Deseos.

Nadie sabe de donde salió el Padre de los Deseos. Nunca nadie le ha visto la cara, pues siempre va cubierto con una blanca túnica y una máscara dorada le cubre el rostro. Algunos dicen que su acento parece árabe; otros, no lo saben ubicar; hay quien incluso dice que cada vez que habla hay una sutil diferencia, por lo que su voz cambiaría con el tiempo. Gracias a su magia, o a exóticas lámparas traídas de la lejana Arabia, o incluso de extraños dispositivos de las junglas de los templos en ruinas de Lustria y las Tierras del Sur, el Padre de los Deseos y sus acólitos empezaron a obrar milagros.

Pronto, más personas se interesaron. Pero cada uno solo podía llevar a una sola persona a un acto. Según crecieron en número, empezó a aparecer gente de mayor clase social. El Padre de los Deseos tenía buenas palabras para todos, y hablaba siempre de un gran benefactor que cuidaba de todos ellos. Lenta pero inexorablemente, los miembros de estos pequeños cónclaves empezaron a ganar influencia y poder. Sutilmente, sus motivaciones y creencias habían sido poco a poco dirigidas por el Padre de los Deseos. Al final, llegaron a tener influencia real en la vida de la ciudad.

Solo fue cuestión de tiempo que el Padre mandara a su camarilla de acólitos a esparcirse por otras ciudades del Imperio, para poder obrar milagros y que a todas partes llegase el bendito toque del Gran Benefactor. Y así fue como el Cónclave de las Maravillas, la más poderosa secta de Tzeentch, se extendió por un tumor por todo el Imperio.

El Cónclave tiene una estructura de mando muy rígida. Solo los más inteligentes y válidos ascienden de iniciados. Los que quedan abajo acaban tan bendecidos por Tzeentch que dejan de poder salir a la calle normalmente, y se convierten en los servidores de los altos cargos del Cónclave. Sus múltiples mutaciones y grotesco aspecto de pájaro les hace imposible vivir en sociedad.

Hay muchos ritos que se realizan, desde el uso de artefactos mágicos como invocaciones de demonios, rituales para hablar con poderosos señores demoníacos y pedirles su bendición, o llamadas para que los hombres bestia tocados por Tzeentch se vean atraídos por una llamada imposible de resistir. Una de las más exóticas artilugios que tiene el culto son las Efigies de la Luz. Estas efigies con aspecto draconiano o de cuervo son portadas con gran reverencia por musculosos y encapuchados miembros del culto, y a través de ellas el Gran Benefactor concede milagros, habla con sus fieles e invoca fuegos multicolores. También son habituales los rituales con cabras, serpientes y gatos, en los que se invocan a poderosos entes malignos; y la creación de familiares mágicos.

La casta gobernante del culto son hechiceros de gran poder. Muchos de ellos proceden de la nobleza, o eran brujos perseguidos por los Cazadores de Brujas. Ahora, llevan adornadas y barrocas armaduras bajo sus túnicas, y manejan un poder sin igual. Ellos animan a los demás miembros a entregarse por completo al Padre de los Deseos, y a mantener siempre viva la esperanza de un gran futuro, un futuro en el que el Padre de los Deseos se convierta en el Emperador y traiga una nueva era de paz y prosperidad a las gentes del Imperio.

Como es de esperar, los Cazadores de Brujas buscan sin descanso el más mínimo rastro del Cónclave de las Maravillas. Suponen una amenaza terrible para el Imperio, y deben de ser destruidos hasta el último miembro. Sus células son casi imposibles de encontrar, y nunca se sabe si el culto ha resultado destruido o si tan solo era una mínima parte de su tamaño real. Las defensas de estos lugares secretos son formidables, pues el Cónclave despliega toda su hechicería para defenderse. Demonios, Tzaangors, bestias hechiceras, humanos sobre los que se han hecho aberrantes rituales y flotan lanzando rayos poseídos por demonios...

Con la caída del cometa sobre Mordheim, el Cónclave se ha movilizado como nunca antes se había visto. El Padre de los Deseos tiene un gran interés en los fragmentos de piedra bruja que inundan la ciudad, y ha prometido grandes dones para aquellos que le traigan grandes cantidades. Los miembros del Cónclave de todas partes del Imperio se han desplazado a la Ciudad de los Perdidos, en donde pueden llevar a cabo sus rituales mágicos sin peligro y seguir practicando su blasfemo culto. Usando mutantes, magia, las poderosas Efigies por la que su señor les habla y da poder y con la gran astucia que les caracteria, pronto este retorcido plan de Tzeentch verá sus resultados.

Anselmo el Setas

Me gusta, me gusta bastante, creo que así gana más coherencia con lo de meter a los tipos de la efigie e incluso los demonios y tzaangors.

Según el texto finalmente lo que tendríamos como base de la banda sería:

Héroes

Maestro del Cónclave
Demonólogo
Cataclista
2 Devotos del Cambio

Secuaces

Cultistas del Cónclave
Huespedes
Tzaangors (sustituyen a los Siervos)
Portadores de la Efigie (sustituyen a los Hechiceros o sustituyen al Draco de Tzeentch? Yo diría que sustituyesen a los Hechiceros y que se quede el draco)

Con ésto más o menos claro hay que tirar por las reglas especiales, que será de lo más importante.

Shandalar

La sección de héroes la podemos retocar incluso.

El Demonólogo y el Cataclista la verdad es que no los veo demasiado justificados. Podemos convertirlos en "Magos del Cónclave" base, es decir, hechiceros del Caos. Quizás con alguna regla, quizás con posibilidad de personalización. O incluso podemos inventar algún héroe nuevo.

Yo dejaría al Draco también, y creo que esta banda puede ser la de tener muuuuchos familiares.

Anselmo el Setas

Es una posibilidad lo de ponerlos como magos del cónclave poniendo que puedes elegir de entre varias magias: tzeentch, fuego y rituales del caos?

Luego debería haber alguna habilidad especial que puedan coger para aprender en el nivel básico las que no tengan de inicio (lo mismo para el maestre).

De héroes nuevos no se me ocurre gran cosa, pero magos desde luego esos dos deberían de ser, podrían tener atributos más malillos para que no saliesen muy caros. Quizás si se juega con lo de que algunos son nobles (o simplemente por el tema de la influencia) podrían tener algo parecido a la segunda parte de la regla de los burgueses descarriados algo modificada (en plan de que si les captura cualquier banda que no sea rollo cazadores de brujas o gente que odie a muerte a los caóticos o a los de tzeentch, siempre se libren haciendo que el captor se lleve un buen pellizco ¡, pero no de la reserva de la banda):

Niños de Papá: los Burgueses Descarriados son de una familia acaudalada, y eso les permite ir bastante bien equipados. Los burgueses descarriados empiezan con hasta 20 coronas en armas y armaduras; sin embargo, ese equipo no puede ser vendido ni pasado a otro miembro de la banda. Además, si un Burgués Descarriado obtiene un resultado de secuestrado, su padre pagará 1D3x15 coronas de oro por recuperarle sano y salvo y con todo el equipo. (el jugador Marienburgs puede añadir más dinero al rescate, pero de su bolsillo)

Neithan

 Mi punto de vista, yo el líder lo pondría como un Hechicero del Caos y los demás héroes magos humanos poderosos, los secuaces igual, humanos en busca de poder o aquellos que le fallaron al Señor del Cambio y fueron mutados por inútiles o débiles, de esta forma la diferenciaba de la banda de Heraldos, siendo buenos en la magia pero muy débiles en CaC.

Pueden ser nobles o estudiosos de magos que han sido humillados o buscan aun mas poder.

Como Héroe un invocador creo que pega, el Cataclista me pega mas en la banda de magos, un mago que domina magia de los cuatro elementos, no se es lo quebme induce el nombre.

Drawer

Mola el transfondo, creo que resume muy claro lo que es la banda. Lo único que en el penúltimo parrafo cambiaría "flotan lanzando rayos poseídos por demonios" por "flotan poseídos por demonios lanzando rayos" o "flotan poseídos por demonios mientras lanzando rayos". Sino casi da la sensación de que los demonios lo que posean sean los rayos XD Pero me reitero muy guapo el trasfondo


El cataclista creo que responde a esto: http://es.warhammerfantasy.wikia.com/wiki/Cataclista

Shandalar

Yo creo que los cataclistas y demás no pegan demasiado con la banda. Pegaban antes, pero ahora no lo veo tan claro.

Creo que es mejor un héroe 0-2 "Herederos de los Deseos" o algo así, que sean los hechiceros. Podrían ser configurables quizás.

Anselmo el Setas

Tengo una idea, a ver qué os parece. Y si esos deseos y maravillas de los que tanto hablamos en ésta banda se viesen reflejados como unos hechizos especiales (rollo trucos menores de la banda de magos) pero que sean únicos para cada mago, sólo se puedan lanzar una vez por partida y reflejen cosas que realmente podrían desear.

Por ejemplo uno de ellos podría ser un ritual para generar más coronas de oro (riqueza), otro que permitiese que el siguiente hechizo lanzado se considerase del siguiente nivel de maestría mágica (poder/conocimiento), uno para devolver la vida a alguien con la marca de tzeentch que haya quedado KO, puede que con algún pequeño buff (el don de dar la vida o algo así) y cosas así, hechizos de dificultad medio alta.

Shandalar

Yo tenía pensado darles acceso al saber de los djinns de los Magos, y crear objetos "milagrosos" como la defenestrada Lámpara de los Djinns y cosas similares.

Anselmo el Setas

También es buena opción, para ése saber habrá que sacar hechizo 0 también.

Shandalar

0-2 Magi del Cónclave

M4 HA4 HP4 F3 R3 H1 I3 A1 L7

Equipo: deberían poder acabar comprando Armaduras del Caos.
Reglas Especiales: Magia de Tzeentch Básica, Sectas

Sectas: al reclutarlo, elige una de las siguientes características para el Magi.

-poder usar el saber de los Djinns
-Poder repetir la tirada al usar Lámparas de los Djinns y otros objetos exóticos (hay que desarrollarlos)
-Lanzar Milagros (lo que ponía Anselmo arriba)
-Otro más que hay que inventarse

Shandalar

Siguiendo dándole vueltas a la banda, he pensado lo siguiente:

-Se me hace raro que los Cultistas no tengan la marca de Tzeentch, y por lo tanto disparen. Sin disparar la verdad es que va a quedar una banda un tanto rara.

-Se me ha ocurrido una idea con los Portadores de la Efigie: y si la Efigie es un héroe porque es un ente en sí mismo? Un héroe muy peculiar, porque no podría ganar atributos o lo tendría muy limitado, sino que ganaría hechizos y poderes. La Efigie tiene conciencia y lleva a un Porteador que la porta, pero no es más que un pelele, una marioneta descerebrada y la que tiene el control total es la Efigie.

-He metido al Ogro Hechicero y a los Tzaangors. Los segundos ya estaban hablados, el primero no. Está sacado de Silver Tower, pero debo decir que hacia tiempo que quería introducir en el juego el típico y mítico mago ogro de todos los juegos de rol y ésta era la oportunidad perfecta. Podría incluso ser un héroe.

-Sin los Portadores y ya veremos si el Ogro, la sección de secuaces queda bastante vacía. Habría que meter algo más. He pensado en cosas que tendrían éstos cultistas en sus sedes para defenderse, qué tal unas armaduras animadas por magia? Estoy abierto a más cosas.

DaniDiablo

Sinceramente, me mola mucho la idea tanto de la efigie como del ogro hechicero, y si los veo como héroes (si no se van de madre). Eso si que daría un toque "diferente" a la banda. Otra cosa, lo de los dijins no lo veo nada, no me imaginó a un sectario de tzeentch usando una magia que corresponde a genios, pero también podría molar bien puesto.

Shandalar

Yo más bien veo las lámparas y resto de objetos "milagrosos" como corrompidos por el poder de Tzeentch.

La magia era una manera de darles "deseos", pero se puede ver que encaja más.

Más locura: y si la Efigie es el líder de la banda? XDDDD